miércoles, 24 de julio de 2013
MIERCOLES DE RELATO / ENTRE POLVO Y CENIZA
ENTRE POLVO Y CENIZA
Hace días que la tierra esta enojada y tiembla constantemente,
pero para los que habitamos la isla, todo esto es normal.
De vez en cuando la diosa Pele, se enfada cuando ve como sus
hijos no la respetan y les lanza mensajes advirtiendo que
aquello no le gusta, que va en contra del equilibrio natural de
las cosas, pero nadie la escucha como antes.
Pocos somos los que seguimos sus ciclos naturales y trabajamos
con ella respetando todas sus etapas.
Desde hace un tiempo han llegado a la isla unos hombres que
están imponiendo sus leyes, a veces crueles e insensatos.
Piensan y dicen que son mensajeros de los dioses y que para
aplacar su ira es necesario hacer ofrendas, pero estas a veces
no gustan al pueblo que los mira con recelo, aunque algunos
se están haciendo sus adeptos.
Desde el otro lado de la isla llegan historias preocupantes y
algunos tiene miedo de que aquí acabe pasando lo mismo.
En la pequeña aldea donde yo vivo, intentamos hacer la vida
de siempre, pescar, recoger frutos, cuidar de los niños, ancianos
y realizar artesanías, que después intercambiamos por otros
productos que necesitemos.
Mi nombre es Maeva y me gusta pasear por la playa para recoger
los pequeños tesoros que los dioses nos dejan en la arena dorada
de la playa, de donde los recojo y guardo para realizar collares
y adornos para las casa.
Mi amado Ikaika muchas veces me miraba y se reía divertido,
mientras pescaba cerca de la orilla en los pequeños recovecos
donde los peces quedaban atrapados por la marea.
Después aprovechaba que estaba distraída para cogerme por la
cintura e intentar tirarme a el agua, mientras sus fuertes brazos
me rodeaban sin dejarme ni un solo instante.
Después me dejaba y volvía a sus lugar mientras yo miraba lo
bello que estaba bajo el sol con su cuerpo dorado y salpicado
por miles de gotas saladas que le daban cierto resplandor.
Pasado el mediodía volvíamos a nuestra humilde casa cerca del
mar y allí poníamos a secar los peces y las conchas que habíamos
conseguido recoger.
Una noche el temblor fue mucho más fuerte y vino acompañado de
una fuerte explosión, Ikaika se levanto deprisa y salió para mirar
hacia la cima del volcán, mientras se caían cerca de allí miles de
bolas de fuego y se podía ver como ríos de roja lava empezaban a
manar por las laderas del volcán.
Ikaika entro corriendo, mientras yo le miraba sentada en nuestra
cama, sin decir palabra empezó a recoger ciertos objetos y los
fue poniendo dentro de un saco de tela.
Después mi miro y con voz serena me dijo:
Maeva recoge un poco de ropa y todos los alimentos que puedas
nos vamos de aquí!!.
Ikaika otras veces esto ya ha pasado y no hemos necesitado irnos,
¿Por que ahora a de ser diferente?.
Por que esos hombres que han llegado a la isla no son buenos, y
aprovecharan esta ocasión para obligar a la gente del pueblo a
tomar una decisión de la cual luego se arrepentirán.
¿De que estas hablando Ikaika?
De que dirán que para aplacar la ira de Pele es necesario hacer un
sacrificio humano y no quiero que nosotros seamos sus victimas,
¿Lo entiendes?
Si Ikaika, pero y si nos descubren huyendo........,
no lo harán de momento están entretenidos con la ira de Pele y es
el momento idóneo para marchar.
Y así lo hicimos recogimos las cosas y las pusimos en la pequeña
barca y bajo la luz de la luna y el fuego rojo de Pele, marchamos
lejos a otra isla donde iniciar de nuevo una vida sin temor y con
la fuerza de nuestro amor.
Tiempo después nos llegaron noticias de que a nuestra hermosa
aldea, el polvo y la ceniza la cubrieron mientras sus habitantes
huían de la ira de Pele y de la mano ejecutora de los llamados
mensajeros de los dioses que mataron a muchos de nuestros amigos.
He de reconocer que cuando oía lo ocurrido una gran tristeza entro
en mi corazón, pero tambien sentía un alivio por estar lejos de aquel
horror que dejo sin pasado a un humilde pueblo pescador.
Ilesin 24/7/13
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Me encantan estas historias-cuento que escribes...
ResponderEliminarBesos abisales
Muchas gracias mi querida Abismo, me alegro que te gusten.
EliminarBesos.
Una historia completa, amor, pesca, mar, collares, calma y egoísmo. Una historia con final semi feliz. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Mi querida Ester, por tu comentario y espero que te haya gustado.
EliminarBesos.
Me encantan las preciosas historias que nos cuentas...
ResponderEliminarQué triste es tener que huir y alejarse de lo que uno ama, por la imposición de otros...
Muchos besos.
Muchas gracias mi querida Misterio, me alegro que te gusten, aunque no siempre es verdad que se puede tener todo y es necesario sacrificar algo en pos de la seguridad personal.
EliminarBesos.
i love you much kisses albert
ResponderEliminarThanks Albert.
EliminarKisses
Me gusta tu relato mi querida hadita de luz. Porque a pesar de la destrucción de un pueblo, se salvaron Ikaika y Maeva al huir de ese lugar.
ResponderEliminarBesitos de luz
Mi querida Carolina, en la unión esta la fuerza y ellos estaban unidos por su amor indestructible que fue lo que les salvo, por que se complementaban, se entendían y escuchaban, e ahí los tres pilares de una relación.
EliminarBesos de luz mi querida hadita.
Una preciosa historia que me lleva a los mares del sur, el amor los hace sentirse unidos y les da la fuerza para juntos seguir adelante.
ResponderEliminarMe ha encantado tu relato.
Un cálido abrazo
Muchas gracias Sneyder por tu comentario y si esa es la filosofía en que la fuerza del amor hace que todos los obstáculos sean más simples.
EliminarBesos
Qué bonita historia y qué bien contada...
ResponderEliminarSí, llegué un poco por casualidad, pero me alegro de que las casualidades sean, a veces, tan positivas.
Un abrazo.
HD
Muchas gracias Humberto, me alegro que esa casualidad te haya resultado agradable y de corazón te doy la bienvenida a este espacio.
EliminarBesos.
Tienes una imaginación desbordante.
ResponderEliminarDe verdad que si.
Besos.
No es cuestión de imaginación desbordante, sino de poner cara a cosas que han pasado en la historia y unirla con algo personificado, eso es lo que hace que la historia surja por si sola y llegue a la gente.
EliminarBesos
Desgraciadamente así es. Todos los pueblos creemos en dioses más o menos ecuánimes, más o menos perversos, pero posiblemente todos estos dioses o/y demonios resultarían totalmente inocuos sino fuera por los mensajeros, o los que dicen ser tal cosa, y en su nombre, se consideran con derecho a manipular y disponer a su antojo de las vidas ajenas y del mundo en general.
ResponderEliminaren tu texto reflejas muy bien la maldad de unos y cómo sólo la unión, la comprensión y la confianza nos pueden ayudar a huir, si no a vencer a dichos mensajeros del mal.
Besos
Así es mi querida Narci, pero a pesar de todo hay que tener fe en que actualmente estas cosas no pasen.
EliminarDe la fuerza del amor nace de la unión y la comprensión de dos personas.
besos
Muy hermosa la historia, y más la emoción y el ímpetu que pones al escribirla, todo llega y todo pasa, cada tiempo tiene su fase, pera la Fe y el Amor triunfan, aunque a veces parace que no.
ResponderEliminarPrecioso relato.
Un gran abrazo.
Ambar
Gracias mi querida Ambar por tus palabras y si la fe y el amor cuando se fusionan es lo que nos da fuerzas para seguir adelante.
EliminarBesos.