MIERCOLES DE RELATO / DESDE LA TORRE

DESDE LA TORRE

Encerrado en esta torre, desde donde puedo ver el mundo
y su loco caminar, donde todo se soluciona a base de reyertas,
duelos, guerras y batallas inútiles.
Pienso que no pude tomar una mejor decisión que la de encerrarme
en este santuario particular, donde poco a poco voy recopilando
todos esos conocimientos antiguos y que bajo manos inexpertas
podían generar un gran caos, donde la sed de poder aniquilaría la
verdadera esencia que hay en su interior.
Se que muchos piensan que soy un viejo loco, pero si averiguaran
que la vida es mucho más fácil de llevar y vivir tal vez todo sería
mucho más bello y armonioso, sin embargo todos aspiran a ejercer
su fuerza sobre los demás infravalorando que juntos, pueden tener
una fuerza superior y que aquello que aniquilan en realidad, es una
parte de si mismos que esconden dentro de sí ocultando la verdadera
esencia de su ser cósmico y espiritual, para evitar ser llamados personas
que andan fuera de la realidad.
Pero desde mi privilegiada morada, y después de ver que todo lo
que yo intentaba enseñar, era al final utilizado en fines no lícitos,
contra quienes siendo débiles, se veían todavía más vulnerables,
decidí alejarme del mundo y esconder en lugares seguros todos
esos conocimientos milenarios y que llevan en su interior bellos
mensajes que hacen a la persona sacar ese potencial de luz,
que tienen en su interior.
Durante mis viajes siempre me he sentido atraído por todas las
culturas antiguas que oralmente transmiten a los suyos los
conocimientos que abarcan todas las disciplinas de las ciencias
y las artes y que sin embargo no son entendidas.
Algunas veces para conseguir llegar a esos grandes conocimientos
uno debe pasar por duras pruebas, sin embargo al final es cuando
uno siente en su interior esa paz, esa iluminación que trae serenidad
y sabiduría a su fuero interno y que provoca un éxtasis de paz.
Muchos de estos conocimientos como ya he dicho se han ido
transmitiendo oralmente de los ancianos a sus discípulos, y ahora
yo soy quien los esta transcribiendo en pergaminos que después
dejare para que en un futuro, quienes sean realmente merecedores,
de esa información sepan que durante decenas de milenios la humanidad
ha ido evolucionando y llegando a tener grandes conocimientos, que le
han valido para comunicarse con formas de gran sabiduría que han
acabado de pulir sus espíritus y prepararlos para que pudieran ejercer
de guías a todos y poder vivir en comunión con una fuerza superior,
que une energía terrenal, cósmica y universal.
Curiosamente cuando estos adeptos son conscientes de los que tienen
entre sus manos, es cuando dejan que sus sombras salgan y ejerzan
su poder, aniquilando todo su benéfico poder, y obligando a sus
mentores a esconder de nuevo el conocimiento para el bien de la
humanidad.
Por ello yo mismo e optado por hacer el mismo camino que mis ancestros
y ocultar a la realidad todo el poder que estos conocimientos tienen
en su interior.
Soy perfectamente consciente que esto genera que mi vida quede atada
por un tiempo a esta rueda karmatica, que me ara volver tantas veces
como sean necesarias, hasta que por fin logre ejecutar mi misión de
entregar todo el conocimiento descubierto y que ahora ocultare.
Pero no me importa puedo ser monje, pero en mi fuero interno hay
un bravo guerrero que lucha por la paz, la serenidad y el amor universal.
Tal vez no recuerde todo lo que viví, pero si sabre encontrar el momento
en que tenga que abrir la puerta a la sabiduría personal, aquella que llena
de luz y esperanza de que nada ocurre sin un motivo aparente, sino que
cada obstáculo de nuestro camino es una lección en nuestra vida que nos
permite avanzar hacia nuestro objetivo final, hacia el nirvana esencial.
Hoy se que mi tiempo apremia, ya que muchos son los que saben de la
existencia de estos preciados conocimientos y de su poder y desean
hacerse con ellos y antes que lleguen debo asegurarme de que nada
encontraran.
No temo a la muerte, ya que eso es solo una nueva puerta hacia la luz
y la serenidad.
Mientras oigo todo el ajetreo mundano que hay a mi alrededor, yo
estoy ultimando mis últimos pasos, con la consciencia tranquila de
que de momento se habrá ganado una batalla, aunque no la guerra
que no lograra la victoria hasta que todos sean conscientes de la
realidad de la unidad.

Ilesin 8/4/14